Pensé que no te amaba
y retrocedí a buscarte,
pero en tu alcoba solo había
el triste recuerdo del amor
que te tuve y no te dí
la cama arqueada del uso,
tu almohada húmeda
de lágrimas de dolor
escuchaba lamentos silentes
en mi conciencia injusta,
solo quiero atravesar
mi quinto espacio intercostal
izquierdo y mi piel, mis costillas
y llegar al corazón arrancándolo de raíz
y sacándolo palpitando
para igualar tu dolor amor