Identificarse Registrar

Identificarse

Índice del artículo


Juro que por un momento lo pensé al ver sus ojos fijados en mi, pero lo consideré como un sueño. Y el maldito sueño no acabó, porque la perrita negra de ojos vivos se me acercó un poco jadeante de tanto juego y meneándome la cola, me pidió que le devolviera la mitad del papel que había escrito y que su hermanito accidentalmente había roto con los caninos, caninos de canino!
Por favor comparta este artículo:
Pin It

 

email

¿Quiere compartir sus eventos, noticias, lanzamientos, concursos?

¿Quiere publicitar sus escritos?

¿Tiene sugerencias?

¡Escríbanos!

O envíe su mensaje por Facebook.

Están en línea

Hay 463 invitados y ningún miembro en línea

Concursos

Sin eventos

Eventos

Sin eventos
Volver