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Estaba yo en mi habitación acompañada de mis pensamientos, en el resguardo de la oscura y fría noche. Observaba a través de la ventana, las infinitas estrellas que brillaban en el cielo. Sentía en lo más profundo de mi corazón, que cada una de ellas me enviaba un cálido mensaje de recuerdos, junto al viento que albergaba allí.

De repente, sentí inesperadamente una lágrima rodar lentamente por mi mejilla. Por un instante pensé que se debía por todo lo que me ha pasado en la vida hasta el momento. Me quedé contemplando el cielo durante un rato, por mi mente pasaban recuerdos buenos y malos, pero uno que me acuerdo perfectamente, se trataba de que yo me encontraba tranquila con mi familia y amigos en una pequeña pero hermosa cabaña, con sus puertas adosadas de girasoles frescos, mis amigos y yo deleitándonos en el pasto verde y revolcándonos entre las dulces flores, mientras nos pasaba por el rostro una delicada brisa…

Sonó el teléfono, permanecí quieta por un minuto, en realidad no se cuanto dure allí, por que seguía sonando, al fin conteste y sin saber quien era dije: hola, casi sin aliento y a través del teléfono se escuchaba una dulce y delicada voz, se trataba de Karen mi mejor amiga, se hallaba triste por que su madre estaba enferma, entonces le dije que enseguida iba a su casa, a ver en que podía ayudar.

Pasada una hora, llegue y golpee a la puerta, una y dos veces aun no habrían, por ultima ves impaciente volví a golpear, hasta que al fin era Yamila su madre, estaba un poco extasiada por todo lo que le paso, detrás de ella estaba Karen me saludo con ganas y me abrazo muy fuerte, me dio las gracias por estar hay junto a ella, y me invito a seguir a su casa, unos minutos después su madre se quedo dormida, Karen aprovecho para decirme que su mama estaba muy mal y estaba asustada que algo malo podría ocurrirle, en esos momentos no supe que decirle, no teniendo mas que hacer allí me despedí muy triste dándole las mejores fuerzas, sintiendo una extraña sensación dentro de mi.

Al día siguiente, Karen volvió a llamarme desesperada,  diciéndome que su madre había fallecido, pues nunca había despertado, me dirigí rápido hacia su casa y encontré mucha gente reunida allí entre ellas estaba Karen junto a su mama hecha un mar de lagrimas, la cogí de la mano y la lleve a dentro, le di un vaso de agua, y respiro profundo mientras yo la observaba levemente. Luego salimos, en eso le dije muy sinceramente, que siguiera adelante a pesar de los retos tan duros que le da la vida, por que si pudo aprender a cuidar a su madre mientras estaba enferma, también lo podía hacer consigo misma, salir adelante y triunfar, acordándose de cada palabra que le dije, me agradeció.

De repente me desperté mirando a todos lados, y me dije que lo que le había pasado a mi amiga Karen tan solo era un sueño. 

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