Dime a ver quién gana. Porque he querido levantar los planos, recayendo en una cartografía que no supera el horizonte. Yo no sé qué hacer, de verdad, no lo sé y lo siento mucho. Se me hace necesario, por ahora, trazar un mapa cuyas coordenadas respondan, para entender las ciencias del presente, entre ellas la geografía humana y a mí. Sí, me he vuelto hacia mí, no espero que tú lo entiendas, pero los distintos ensayos me han desgastado, tan solo han sido intentos fallidos y me necesito. Por eso a veces no quiero hablar, me pierdo y solo escribo rutas ¿Estarás bien? Porque yo lo espero, No está mal empezar a reconstruir lo que se habrá desprendido. Tal vez la tierra es así, a veces sacude. Te juro que sostengo la fantasía hasta su último instante, pero hay palabras que me vuelcan otra vez al mundo, muchos dicen que la realidad no es mala que solo encierra acontecimientos físicos, yo supongo que es una extensión más del espíritu. Me duele decir lo mucho que me duelen mis palabras cuando no las controlo, se me escapan y te hacen daño. Es que contigo hemos caminado sobre tantas trincheras. No me culpes por favor, porque me cuesta aceptar lo mucho que me cuestan tus juicios cuando me arañan el alma. ¿Dime a ver quién gana?