Empiezan las dudas, la indiferencia, el dolor, ¿Te quiero o solo es un capricho? Yo se la respuesta, me interesas, en serio quiero estar contigo, más no creo que sea posible, no me buscas de la misma forma, no me respondes de la misma forma, no me quieres de la misma forma, te quiero, quiero estar contigo, quisiera sentarme contigo en una banca y abrazarte por detrás sabiendo que contigo mi mundo estaría más tranquilo, solo ocurre eso en mi imaginación, imágenes que se convierten en polvo cuando veo la realidad de las cosas, la banca es mi cama y tú eres solo mi almohada, la misma que abrazo y he llorado varias veces.
No me gusta el amor, pero te hace sentir bien, vivo, lleno de ganas, te ayuda a crecer, pero no me gusta porque duele como un cuchillo afilado que te recorre todo el pecho, también sientes que mueres en vida.
Mi insomnio tiene nombre, mi dolor tiene apellido, sé la música favorita de mi meta imposible, no sabré todo pero si lo suficiente, el amor llega, no se busca, lo repito miles de veces, no me importa un buen trasero o unos grandes pechos, eso conmigo no va, no quiero presumirte, quiero amarte...
Ser él quien te haga sentir segura, valiosa, bella, increíble, interesante, solo quiero hacerte entender todo lo que ya eres, pero creo que no voy a ser yo esa persona, la encontrarás, pero no seré yo.
Lo más cercano que estaré será verte tras el vitral bajo la lluvia viendo cómo sonríes y besas a alguien más que no sea yo, aunque no creas sonreíre de felicidad mientras los ojos agarran el brillo característico de las lágrimas, no soy tu tipo, soy valiente pero también estúpido ya que se que no va a funcionar pero siempre veo la mínima posibilidad y voy con todo arriesgándose.
Vivo con ese temor de que cada mensaje que me mandes sea el último que me envíes, sé que no es necesario hablar diario pero siento que si no lo hago estaré perdiendo algo que en primer lugar no sé si tenga, que habrá otro chavo que llegara y te tomara como suya mientras yo veo de lo que me perdí, por ser un cobarde al mismo tiempo.
En mi mente he divagado mucho cómo sería estar contigo, y realmente he sonreído al grado que se me olvidan los problemas, le hablo a todos de ti, todo lo que me gusta de ti, sé que todos tienen defectos y en ti todavía no los he visto o en dado caso no me han importado.
Me gustaría llevarte a tu casa, escucharte y conversar, conocerte a profundidad, conocer tus gustos, saber todo lo malo de ti y aún así quedarme contigo, porque tu compañía sería lo mejor que puedo tener, sería mi regalo de cumpleaños, navidad y reyes en uno solo.
No somos nada pero siento que te empiezas a convertir en todo lo que busco, la mujer que quiero que antes no tenía ni idea sobre que querer, alguien con quien salir adelante, yo me quiero, ahora quiero quererte a ti, conmigo estoy al 100%, contigo quiero llegar al 200%, tengo mis metas en la vida, quiero que tú seas una de ellas.