Hay dos palabras que se suman a otras que se usan sin consideración en Colombia y, lo malo del asunto, los periodistas son los encargados del abuso en el uso de dichos vocablos. Estas son PRESUNTO Y SUPUESTO. Siempre acostumbro a dar las definiciones de la Real Academia de la lengua RAE como soporte de mis opiniones. La honorable academia dice así:
1. PRESUNTO: se dice de aquel a quien se considera posible autor de un delito antes de ser juzgado
2. SUPUESTO: presunto
En el diccionario no habla de las acciones sino de las personas. De manera que hay presuntos violadores, asesinos, atracadores, ladrones, estafadores y otros delitos contra la ley humana. Contra la ley de Dios se llaman pecados mortales y allí si no hay presuntos sino pecadores y no hay que probarles nada porque está en la conciencia de cada uno.
Pero, volviendo al tema. Los noticieros hablan de presunto robo, incendio, accidente, muerte. Me da risa ver y escuchar a estos “presuntos periodistas”; el muerto está muerto, el incendio se está ocasionando o ya se apagó, la violación fue consumada, el asesinato cometido. Por favor, no hay supuestos muertos, robos o asesinatos, estos son hechos realizados fuera de toda duda, es al autor de estos a quien hay que probarle su participación y a este ser, por despreciable que sea (como los violadores y asesinos de niños y mujeres indefensas) se le considera presunto.
Dejemos de abusar del presunto y su hermano gemelo el supuesto porque se generaliza y, de pronto, resultan los supuestos periodistas hablando del presunto terremoto de Ecuador. Los hechos y acontecimientos no caben dentro de esta palabra que se deja para los seres humanos que, muchas veces, solo de apariencia lo son.
Edgar Tarazona Angel