Incluso, en algunas ocasiones,
La meta he contemplado ya,
Más... esa es la que otros alcanzaron,
Y está, no es aquella a la que pretendo llegar.
¿Cómo llegar a mi ansiada meta?
Responde, te lo ruego ¡Oh Señor!
Ayúdame a encontrar el camino,
O por lo menos dime que no pierdo la razón.
05 de diciembre de 2000