Vana pretensión la tuya
si me pides no ocuparme
de ti ni de tu suerte.
No quiero atribuirme
controles ni tutelas
pero debo recordarte
que duermo y me levanto,
me baño, me alimento
escribo y displicente
deambulo en mis paseos
llevándote conmigo
Lo niegues o lo adviertas
tu vida es para mí
un asunto más que serio
Al punto que sin ella
la mía, poco importa
no más que para el aire
que respiro.
Por lo tanto
si de ti no me ocupara
de mi yo no lo haría
¿Lo comprendes?
No puedo no atenderte
Depende de tu vida
la mitad de mi muerte.
René Bacco