Creo siempre que su angustia
intenta perderse en el mirar
de un amanecer sólo para ella
que duda a morir en regresar.
Aún conservo su triste perfume
disuelto en el espacio
y todo lo que es igual a ella
cuando ayer se estaba muriendo
atenta a mis latidos.
*
Y la amo a ella, que es igual a desvanecer
todo el tiempo que ha pasado sin verla
aunque me vea envejecer, frente a espejos
que guardan sonrisas tiernas;
lo intento esta vez,
y al silencio no le basta con verme reír
porque nunca está ella
¿dónde estará ella?, me pierdo en un beso
que nada me pudo prometer.
*
Miro al cielo y nada le creo
porque me robó mis nostalgias,
y lo triste es que no sea azul
lo triste es que siempre se marcha.
Soles dueños de horizontes
mueren como ella quiere morir
inalcanzable y feliz, como hoy,
besándome y sin dejarme decir
que la llevo dentro.
*
Y la amo a ella, que es igual a desvanecer
todo el tiempo que ha pasado sin verla
aunque me vea envejecer, frente a espejos
que guardan sonrisas tiernas;
me pierdo en un beso
que nada me pudo prometer,
sólo el aire y yo amándote
disuelta entre brisas suaves
que acarician mis infiernos
de verte y no escucharte
aunque sonrías y yo sepa, que esta parte
es una más de mis sueños.
*
Lo intento esta vez
y al silencio no le basta con verme reír
porque nunca está ella,
¿dónde estará ella?