Dedicado a la Comunidad literaria el Rincón de los Escritores.
Enebrina había leído a Márquez esa noche.
-Con los ojos arropados y en fetal posición,
intentaba descifrar aquel derroche
de elocuente e ignota inspiración.
Caviló: en lo que escriben escritores y bardos.
“¿ De donde extraen el almíbar?
¿Con que garrapiñan los nardos?
En los que el zumbaflor llega a libar”.
“Dicen que la noche es sigilosa
y que desliza su crespón.
Que es testigo silenciosa
de los que viven en traición”.
“Que tenemos embrujo en los ojos,
que somos el aire que respiran,
y suplican amor de hinojos
de lo contrario expiran”.
“Describen con lujo de detalle
de nuestros besos el sabor.
La proporción de nuestro talle
y nuestro fuego abrasador”.
“Que somos causales del vicio,
que les restamos el sueño,
que nuestro amor es un artificio
disfrazado de olor almizcleño”.
“Que desmesurada imaginación,
siempre encuentran la palabra precisa
en sentimientos o renunciación,
fuego que abraza o aliento de fresca brisa”.
“Los poetas son como estrellas
que aunque su vida ya extinguió,
continuará iluminando lacayos y doncellas”.
Shiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii ya se durmió.
Baltazar Peña 01/06/2008