Me sorprendo recordando lo olvidado
mientras busco en lo alto del tejado
una huella que me acerque hoy a ti.
Buscando aliento, subo y busco
y no encuentro ni un momento
de los años que perdidos en el tiempo
nunca vuelven y se quedan sin venir
Mientras tanto, en las sombras que cobijan los antojos
nos comemos y besamos con los ojos
esperando despertarnos siempre así
Y en el llanto, que es la furia por haberlo olvidado
que la vida está llena del pasado
y su rumbo parte hoy de nuevo aqui.
María del mar San José Maestre
Rota, 5 de Mayo de 2008