Bogotá, Colombia. La ciudad rescatada
¡¡Somos legión, Somos legión!!
Repite con vehemencia la asesina
Desde lejos la observó cortando el tiempo
A tientas, sopeso su rostro en un rincón del alba
Dónde el vacío me toca y restaña la luz,
La suerte le ha lanzado a tientas sobre el vado
El menester ahora de mi alma que hace un respingo
Está se escapa por las bocas, cada filon
En su empresa, coces de llanto o tormenta
Analizo su intento patético y altisonante
Tal como un monstruo de agua que resiste el olvido,
Borra del espejo de la vida todo argumento
PIerdo la noción de la escritura solicitando su perdón
Cuál reyerta aclamó mi propio palimpsesto
Oculto en el alud de rimas escuetas y libres
Casi puedo tocar el delirio con mis manos
siento en las miradas furtivas, casi azules
De esta orbe sucia y sin gracia
Dónde los camellos torpes cojean de felicidad
Entre campanas de sol que estremecen el polvo
He aquí que me siento parte del bucle y orgulloso,
Atrapo la poesia en mis manos delicadas y sutiles,
Aclamo el signo y busco la sustancia como Grial
Empero, mi espalda reposa de pobreza
Sobre dunas aún más tristes que el brío taciturno
Este destroza con vanidad su fenómeno
Recuerda mi apariencia pueril y sensata
¡Sobre mi espejo no reposo malicia alguna!
Asi, la Nayade alega en el óxido, su cadena
Arrepentido de perseverar como el crepúsculo
Tiento la empresa de no obedecer al claro
Pues la Pandora ya no me pertenece
Se esconde entre el lomo de congojas absurdas
Solo construye el sudor, un esbozo simple
Tan escualido y futil como determinismo
Hambriento, he inmoladoaquella habitación sin esquina
Arruinado sus paredes y marchitado el osculo
¡Pero sin voluntad, se levanta como creacion
Y florecen de su maleza Peonias y Mirlos falsos
Que levantan su voz sobre mi sueño!
Me obligan a charlar con el cenit
Confundido, obedesco a la fuerza
Y camino como un clavo de aceite
Entre cada gota de Hado florece arijuna
Hace entonces mi ingenio y despierto a la prosa ....
