La fruta prohibida la que se empieza a degustar / las mieles en la boca / el jugo saboreado despacio / esa gota que se arranca a la aventura por la comisura de unos labios / deslizándose por la suavidad de un cuello esbelto / serpenteando a través de unos pechos enhiestos / fluyendo por el bajo vientre / agonizando en la oquedad vibrante de un centro / intentando escapar para llegar al cálido sexo...
La fruta prohibida que renace vigorosa / divina y apetecible, casi como una diosa / la que se siente tan lejos, la que tan cerca se tiene / la que a veces se roza pero no se toca porque quema/ la que te marca pero la que no puede dejar huella / la que ansiosa tanto se espera / la que te emborrachas con su aroma, la que se olvida su olor por que no se conserva / la que se pierde en el tiempo...
La fruta prohibida la que grita que se la coja / que clama por ser acariciada, besada, casi idolatrada / la que incita al pecado capital / la que te enamora, la que se deja querer, la que se desea / la que está presente, la que está en las mentes...
La fruta prohibida las que todos anhelan / la que se come sin saciarte / la que se desnuda con la mirada / la que se adora en silencio por temor a perderla...
