Por Dios que me producen lástima,
Por Dios que no tienen ni honor ni voluntad.
Guiados por un ser maligno:
Matar en venganza a los que se pueda matar.
Y no entiendo como los hombres,
Se dejan guiar por ese maligno ser.
No entiendo porque no escuchan sus corazones,,
Porqué no cambian su forma de ser.
Maldito aquel que presione el gatillo,
Que mate porque placer le da,
El hombre no fue hecho para ello,
En los planes del Creador no estaba el asesinar.
¿Por qué? Pregunta que me hiere,
¿Por qué? Pregunta que no me deja pensar,
Y menos escribir sobre lo bello,
Y mucho menos sobre la desgraciada humanidad.
El único consuelo que me queda,
Que luego de la conflagración mundial,
Será una época de paz y armonía,
Pocos quedaremos como para querer luchar.
miércoles, 17 de octubre de 2001