Este silencio llena mi espacio sin dejar cabida a las palabras, a las explicaciones, mi voz nuevamente tiene que salir para saber si aún existo o simplemente soy un chiste, probablemente la caricatura de una mujer.
Esperando siempre ese momento, esa verdad, esa intención, ese abrazo que me haga volver a creer en este argumento, ¿Cómo saber, si todo a mí alrededor carece de color, de sentido…de razón?
Indudablemente me encuentro parada en medio de un juicio entre mi fundamento y la razón ¿Es posible que mi corazón se equivoque de esta manera? ¿Es posible no ver esta realidad que me atormenta? ¿Es necesario caer una y otra vez para encontrar respuestas?
Dando vueltas en este mismo camino, quiero encontrar la evidencia que me haga ver la realidad, que me haga sentir menos dolor, que me haga decir la verdad, que me haga creer que este día es tan sólo uno más y que mañana no habrá que recordarlo.
¿En verdad este desacierto es provocado por mi inmadurez? ¿En verdad este disparate es parte de mi libreto? No quiero sólo silencio dentro de mi alma, no quiero mentira ni confusión, sólo quiero una respuesta que me haga coexistir dentro de este mundo lleno de iniquidades.
Escucha mi plegaria, escucha mi corazón que grita por tu amor, por tu sinceridad, por tu calor…escucha mi alma que añora tus palabras, que necesita de ti para poder ser una persona, para ser un ser humano…para poder ser una mujer.
MARISOL HERNANDEZ MANRIQUEZ
