Verse en los versos no escritos.
Verse en los besos no dados.
Verse en las cosas que ha callado, que ha omitido, que ha velado.
Verse en las palabras nunca dichas y en las dichas que nunca ha gozado.
Verse en la miríada de miradas no miradas
y en los mares y mareas que no lo pudieron ahogar.
Verse en un hogar que no lo acuna y en una cuna que no lo oye llorar.
Verse en lagrimas no derramadas, en risas no reídas, en caminos no recorridos.
Verse al reverso y al inverso y versar sobre ese verse sin verse que lo agobia.
Verse sin verse y romperse.
Romperse y roto no poder evitar verse.
Verse fragmentado y darse cuenta
que no veíase en donde debíase mirar.