Identificarse Registrar

Identificarse

Esperar. Esperar y tratar de no aterrorizarse, pero la verdad es que no es fácil. Cuando uno es chiquito le dicen que en situación de crisis lo que lo va a matar es el pánico. Pero, si a uno no le da pánico, ¿qué hace, aparte de esperar? Esperar es lo peor del mundo. Es peor que el pánico. Es no saber si va a pasar algo, pensar en lo que está pasando en vez de funcionar por pura adrenalina. Es mortificante.

Es lo que me estaba pasando esa noche. Después de hacer miles de cosas solamente para sobrevivir estaba acorralado entre un colchón y una puerta, pensando en lo que iba a hacer. Y lo peor era que no tenía la menor idea. Después de todo, nadie había esperado que esto pasara. Los 'zombis' son productos de la imaginación y de las películas, nada mas. Eso era lo que todos pensábamos antes de que esto pasara. Los detalles son inciertos, tan inciertos como si fuera un espectador en vez del protagonista. Nadie pensaba que esto fuera a suceder. Es cierto, cuando el hospital de genética fue fundado hace un lustro todos bromeamos que los clones iban a ser monstruos, zombis. Todos dijimos que era inútil y que nada saldría de eso, solamente plata que el gobierno perdería. Pero nos equivocamos. No sobre la plata, el gobierno va a perder más de lo anticipado, obviamente, tratando de encontrar una vacuna, ayudar a los enfermos... si queda gobierno después de esto. No me sorprendería que lo único bueno que viniera de esto fuera que no tuviéramos gobierno.

 Todo empezó hace tres días. Eran las doce de la noche y me levante porque tenía frío y quería otra cobija. Diana, mi mujer, me dijo que le trajera una coca cola porque tenia sed y la había despertado. Cuando fui a la cocina, miré a través de la puerta de vidrio del balcón y vi que la ciudad estaba en llamas. De pronto me di cuenta de todas las alarmas que había alrededor nuestro y de los carros de policía y bomberos en nuestra calle.

-Diana, Diana, levántate!- Grite.

-¡No!

-¡Hay un incendio!

-¡Mentiroso!

-¡No, es en serio!

Eso hizo que se levantara y viniera a la cocina. Había humo por todos lados y sabíamos que teníamos que salir del apartamento. Diana me dijo que iba a empacar algunas cosas y luego nos íbamos a ir, pero no sabíamos a donde. Diana trato de marcar el número para llamar a sus papas pero el teléfono estaba muerto. Se dio por vencida cuando trató de marcar el número de su hermana, en Australia, y el teléfono no reacciono. Supongo que fue suerte que saliéremos del apartamento entonces, decididos a ir a la casa de mis padres en las afueras. Claro que cuando salimos del parqueadero nos dimos cuenta que todo el mundo había tenido la misma idea que nosotros y había mas trancón que después del pico y placa así que decidimos caminar. Yo sé que puede parecer extraño pero no podíamos hacer mucho, nuestro edificio se iba a quemar y no íbamos a tener donde vivir pero era mejor que no vivir, obviamente. 

Por favor comparta este artículo:
Pin It

Bienvenido a la comunidad de escritores, poetas y artistas del mundo.

 

Aquí podrá darse a conocer, conocer a otros, leer, disfrutar, compartir, aprender, educarse, educar, soñar y vivir el mundo de fantasía que hay en todo artista.

 

¿Quién sabe? ¡A lo mejor también es uno!

Están en línea

Hay 1584 invitados y ningún miembro en línea

Concursos

Sin eventos

Eventos

Sin eventos
Volver