Regresaba todas las noches, alardeando de la plata y prendas de oro que se robaba, atracando con una pistola de juguete.
Anoche se metió a atracar en un Supermercado y recibió dos tiros mortales en la cabeza.
Alguien le quitó de las manos un bolso donde llevaba prendas de oro y dinero en efectivo.
A lo lejos sonaba en el equipo de sonido Pedro Nabaja.
A los pocos minutos llegó el carro de la funeraria y la esquina se llenó de sus amantes.