¿Cuánto daño nos hemos hecho?,
Tantas peleas e insultos que contaminan nuestra alma
y nos matamos por dentro.
Lanzamos palabras llenas de ira momentánea,
que poco a poco borra el cariño tan pequeño que sentimos.
Guardo en el fondo de mi corazón los buenos momentos,
tan pocos que son contados y me hacen ver lo mejor de ti.
Recuerdos cortos y bellos que tardan mucho en repetirse
y que honestamente para mi valen oro.
Tengo que irme porque definitivamente no tengo otra opción,
podría quedarme y volver a disimular que no ha pasado nada,
pero es muy probable que en poco tiempo volvamos a lo de antes.
Es la despedida, ambos sabemos que es lo mejor
y sabes muy bien que muy profundamente es tu mayor anhelo verme partir.