ADVERBIOS
De tus jamás a mis tal vez se arremolinan
las huellas frescas de tu voz y tu sonrisa
la sensación de haberte visto en cada esquina
de un mundo ideal siempre soñado a pura prisa
Y quien soy yo sino el viajero sorprendido
de la nostalgia deambulante y predecible
de aquellas horas que anhelé y que no he vivido
y que es de pronto pasaporte a lo posible.
Entre mis nunca y tus quizás no será en vano
esa distancia entre encontrarme y descubrirme
cuando en tus manos cobijar quieras mis manos
y, exorcizando mis fantasmas, redimirme.
Y tú quién eres sino el aire que impaciente
despeina el mar enajenando su destino
donde naufragan tus temores penitentes
siempre que tornas suave brisa en torbellino.
Entre el sinfín de los porqué navega un cuando
imaginando desde el cómo y hasta el dónde
hemos de ser quienes seremos caminando
desde el café que en la promesa aún se esconde.
Cuando tus nunca y mis jamás desvanecidos
libren las almas de inquilinos opresores
de mis tal vez y tus quizás habrá nacido
esa esperanza que haga luz los resplandores.