Solo recuerdo sus batas blancas y una mascarilla acercándose a mi boca. Todo se oscureció.
Y, estaba sentado allí con un chico que miraba y reía.
El lugar era una estación de bus, solo estábamos los dos.
-- ¿Que hago acá?-- pregunté.
-- duermes-- respondió balanceando sus piernas.
-- ¿Y tú quien carajos eres?--
-- el tiempo--
--¿ el queee.....?
-- sí. Tranquilo. Vas a despertar;
pero un favor especial.‹« No escribas más poesía».--
Luego desperté en recuperación.