Creía que mi corazón había sido fuerte, pero sólo fue camuflaje de baja calidad, pues parece que derrama lágrimas…casi coaguladas.
Va sanando lento, pero sana.
Vamos corazón mío, no basta esa sonrisa, mejor ríe.
Ayúdame a no equivocarme… que me dices tú; háblame con ese tu lenguaje, cuando estoy cerca de el quiero sentir tu palpitar.
No me dejes sola con la razón, ahora entiendo por que no es tu amiga; pues suele equivocarse.
Dime corazón mío, con tu danzar; cuando parezca que una fiesta en mi pecho hay, lo miraré fijamente a los ojos y tendré que aceptar que yo no mando en tu juicio.
No te equivoques corazón mío, por que no quiero lastimar a quien por mi alma poeta se ha dejado enamorar.
Vamos, falta poco para tu total sanar; yo he comenzado a reír no me dejes sola, haciéndolo pasar como un disfraz.
…Gracias corazón mío, por no abandonarme…ambos sonreímos y ahora que te observo y me miro en el espejo…ya cambió nuestra faz…reímos en libertad.
14/03/04
22:00hrs.