Mis padres me lo habían advertido... "llegar en punto no es llegar a tiempo".
Pero, la juventud ayuda a pensar que todo será posible de realizar con seguridad por mas difícil que sea.
difícil que sea.
Me había levantado bien temprano; tome mi baño, desayune lo que mi madre me había puesto sobre la mesa y luego muy prolijo emprendí el camino hacia el colegio.
Como había salido de casa con bastante tiempo, decidí pasar por el mercado Chino a comprar un amuleto para una compañera que, muy graciosamente era por demás supersticiosa y necesitaba de ellos para cada emprendimiento, desde dar un examen hasta como pasaría el día y sus circunstancias.
Luego pase por el bar de cerca del colegio para ver a mis amigos y compañeros, Ya me sentía raro, algo empezó a pasarme orgánicamente que no era normal, cuando me repuse seguí lentamente y confiado.
En ese instante y así... sin previo aviso y de la peor manera empezaron a sonar mis intestinos, corrí y atine, ya tarde, a meterme en una cabina telefónica donde llamé a mi madre, para decirle con mucha preocupación lo que me había ocurrido y temiendo por mi salud.
Ella, muy calma me contestó... Hijo sos vos? ¿que hiciste con el vaso amarillo con el laxante para empezar mi dieta y estaba sobre la mesa????. Me caí .
Susana Stefania Ceruti
20/07/2008