La existencia de mi ser, va caminando en una línea, donde la luz y las sombras no se ocultan y conviven abrazadas en un plano físico, palpable de esta real dimensión, la luz va reflejando las diversas faces por donde voy transitando, desde lo más claro a lo más sombrío de mi realidad; sin embargo, la luz prevalece y me guía por un sendero existencial del presente de lo que soy ahora y de la incertidumbre de un futuro desconocido, donde los hilos de la luz como hebras de seda de tela de araña el universo va tejiendo.
Existo porque aún me puedo ver, me puedo sentir, donde puedo oler, degustar, saborear, donde puedo discernir, cuestionar y pensar; existo porque soy palpable ante el mundo que me rodea; existo porque permito que los sistemas y redes me conozcan; existo porque hay un registro de mi nacimiento, de mis logros, de un pasado plasmado en la pared, el lienzo de la vida misma, así como el hollín, la pintura, el carbón que va dejando huellas de mi efímera existencia; existo porque me puedes ver? Existo porque como así el invidente sin a ver visto nunca una manzana, la puede reconocer por su olor y redondez y aun así queriendo engañar en un dolo que la naranja es una manzana, la verdad ante el mundo siempre será revelada y develada ante lo oculto que estaba manteniendo un secreto de la realidad. Ocultar el sol entre las nubes, eclipsando su existencia, es un (Sol - cidio). O querer negar la existencia de Dios, como un ser divino y omnipresente.
Así como en los sueños viven en su momento existencial en lo más intrínseco de mi consciente y subconsciente, ello tuvo su existencia allí, y al despertar sigue vivo y es real mientras sea compartido y divulgado con el mundo y otras personas, será como la epifanía, la aparición, manifestación o el fenómeno a partir del cual se revelara un asunto importante. Así como la música existe porque es audible y es vibrante y la existencia de su tonalidad. Un sordo puede crear música solo sintiendo su vibración y lleva el ritmo en su cuerpo y el tiempo y el compás con las manos. Así como la semilla que nunca vi y allí nació dio frutos y pereció, no puedo negar su existencia por no la haya visto, esa es la esencia del ser.
No puedo y nadie, puede negar la realidad de las cosas que nos rodean en el plano físico, sentir el calor, el frío, el aire, la humedad; el calor por la ausencia del frío, la llama de un pequeño fósforo que irradia calor y quema, el frío en un cubo de hielo, la humedad como el vapor de agua, en uno de sus estados y que existe allí en la atmosfera y se convierte en agua y da a la formación de las nubes. El ser de cada cosa existe allí, en lo silente y en lo que no se puede ver, pero se puede oír y más allá. Quien puede negar?, la existencia de un cáncer que es silente y hiere, mata y se revela en su última etapa de la metástasis.
Estoy consiente y vivo, y sin conciencia aún vivo, porque existo y soy parte de la humanidad que le da sentido a un mundo que aún no comprendemos del todo, como el alma, el espíritu, existen así como la sombra que emite mi lápiz cuando escribo, y van quedando plasmadas las palabras en las hojas, en el lienzo, en la pintura del artista, el creador de su propia obra, de su propia realidad adherida en el tapiz de lo inefable de su obra y creación como legado.
R.A.R/2021.
