Siempre llegan esos momentos que nos enseñan:
-Que NO somos tan fuertes como lo aparentamos a diario.
-Que NO somos tan sabios como creemos.
-Que algunas personas que llamamos amigos en realidad no lo son.
- Que algunas sonrisas fueron fingidas.
-Que no debimos juzgar sin antes conocer.
- Que hay abrazos que debieron de durar cinco minutos más.
-Que debíamos ahorrar.
-Que debimos contestar esa llamada que nos hicieron por la madrugada, ya que fue la ultima.
-Que los momentos en familia se deben aprovechar al máximo.
- Que nunca debimos rechazar el consejo de papá y mamá.
- Que siempre debemos orar.
- Que debemos ser agradecidos con Dios por lo que nos permite poseer.
- Que Dios es FIEL y que su voluntad es perfecta.