Lagunas mentales, desechos de humanidad, limosnas de bondad, presagios ardientes; yase inmutable el más valiente.
Problemas agotados, agotados los soldados, que ya sin capa ni espada continúan a los arañazos...
Quien te ha visto y quién te ve, tan soluble a los requerimientos que no sabes que es mentira, que no sabes si existe verdad; más tus enojos a unos cuantos pusieron a pensar...
Lagunas mentales, pérdidas de memoria selectivas.
Veo sangre, veo violenta perdición y han tomado de reen a la mismísima sociedad. Naturalizado el caos el paraíso suena a falacia.
Hay movimientos defendiendo lo impensado, alardeando banderas que ni saben cómo se crearon.
Ni aceptan la derrota, ni luchan por retomar posicion. Hablan feministas, pro vida, políticos partidistas momentáneos; todos sin camiseta. Los desnudas y no hay más que miseria.
Mamarrachos disfrazados. Riñas de gallos que no llegan a gallinas.
La casa de las locas, las locas en la esquina, que desorden por la calle, acosa la cartelería.
Ruido, ruido en la calle, ruido en comunicaciones que más que propaganda aclarante, publicitan.
Mucho café por hoy, páseme un somnifero eterno así cuando despierte, quizás que sé yo, la desidia de miles de guerras ya pasó.