He aquí el primer poema que escribí, a una chica que me gustaba demasiado, lo escribí ya hace un par de años y espero sea de su agrado.
Tu ausencia alimenta tan grande vacío en mi interior
Y tu presencia el desborde de la dicha de tu cuerpo,
Y tu fragancia es a mi olfato como un tesoro de aromas
Y un mundo de gratos sentimientos encontrados
Y es que tu adorable silueta rompe con mi imaginación,
Y el amor se da en mí como por arte de magia
Entonces se que el destino a ti y a mi algo nos presagia,
Y es menester de que por magia surja nuestra unión
Es la antología de mi amor y tu insistente belleza
Lo que en mi alma y corazón han dejado huella
Y no es fácil describir que tan grande es la destreza
Con la que entras a mi cabeza tú hermosa doncella
Intentar lidiar con tu personalidad, majestuosidad y esencia
Es querer provocar un desorden sentimental en mi interior,
Y maldito es el ambiente que se desencadena a mi alrededor,
Y malditas son las ganas de llegar a ti con tan desesperada urgencia.
De las pocas palabras que salen de tu linda boca hacia mí
Ninguna grita lo que tanto ansío oír de tu interior
Pero a la vez todas me elevan a un hermoso trance espiritual
Y en mis sueños todas murmuran que tu cariño se sale de lo conceptual
Son incontables las cosas por las que he tenido que pasar
Y tú como mi final estas al principio de mi ansiedad
Y ahora mas que nunca siento que está mi destino a tu disposición,
Un sí o un no se proyectarán en mi futuro como tu esencia o tu desaparición
Inmunda es mi torpeza cuando tu resplandor me ilumina,
Que vil y malagradecida forma de reaccionar la que se da,
Puedo saborear el fruto amargo de mi negligencia
Y el dulce abrazo de tu aire cuando estas tan cerca
Ahora ya no se ni que pensar,
es para mi un imán tu imprescindible y femenino mundo
no hay forma ya de querer tu luminosa aura evitar
y mas aun cuando se que la miseria se sienta allí afuera a esperar
Dime lo que piensas blanco y puro manantial
Dime lo que te plazca, lo común y lo inusual
Dime el por qué de la magia de tu ser
Solo una palabra de tu boca por mas torpe que sea
Despierta en mi lo que nadie antes pudo despertar.
Andrés David Arias Zambrano