Queriendo huir de todo
me arrojé a otros brazos,
y de abrazo en abrazo
me alejé de ti.
Y vuelvo a los tuyos
que me dan la calma
y creo en tus brazos
sentirme feliz.
¡Estoy harta!, grito a cada rato,
¡estoy harta de todo!, ¡estoy harta de ti!,
y digo todo esto y yo no comprendo
cómo harta de todo… sigo estando aquí.
¿Será que te quiero y no me doy cuenta?,
¿será la costumbre de estar junto a ti?,
¿será que estoy loca?... yo ya no lo entiendo,
pero cuando no te tengo… me muero por ti.
2/abril/2006