de esta vida sin par,
cerrar los ojos y decidir
si esto es su verdad.
Deambular por las calles y descubrir
mil formas de existir,
rezumar serenidad
cuando el dolor la quiera herir.
Quién puede contarle
sueños vividos que no conocerá,
vislumbrar acertijos de una mente
cansada de vagar.
la paz interna material,
espíritu desolado mensajero
que fluctúas en la realidad.
Quién puede narrarle
esperanzas en forma de voluntad,
alegrías ocultas tras la calamidad,
comprensión en el hechizo de la soledad.
Azar descrito en la línea de su sino,
integridad para un Karma languidecido,
sepultura letal para un cuerpo dormido,
coraje para superar un pasado no extinguido.
Quién puede susurrarle,
viajes inéditos sin regreso,
fortaleza para desafiar un presente consumido,
amores acaecidos de un tiempo no nacido,
temores amparados en el consuelo de un amigo.
Existirá esa mano,
conocida ó desconocida,
que camine a través de la luz,
la luz de tu vida.
Será amiga ó enemiga,
tranquilidad ó melancolía,
locura ó sabiduría,
será...ó no será...
Alguien habrá...