Esta historia es como cualquier otra, es simple y vagabunda.
Esta historia es secilla , porque la vida es sencilla; la complejidad que se vive, es creada por nosotros mismos.
Aquí es Marinya, la tierra de las mairposas
Se dice que esta tierra estaba totalmente deshabitada, hasta que un noche , un hombre y una mujer llegaron del mar para concebir un hijo en la playa .
Cuando éste nació, millones de mariposas fueron encontradas muertas en la orilla del mar. Todas la mariposas se quedaron pegadas en la arena, y con las osilaciones de las olas ellas fueron desapareciendo. El recién nacido, quedó cubierto por mariposas y arena.
Los padres fueron regresados a las profundidades del mar, por haber concebido a un hijo terrestre, por haberlo parido en esa tierra prohibida.
La criatura fue criada por las mariposas que lo alimentaban con sus lenguas enroscadas , por la arena que le enseñó a formar parte de la tierra ,por la espuma que guardaba sus pensamientos para que a la hora de que el durmiera sus ideas descanzaran, y el mar se encargara de velar su sueño.
El niño siguió siendo niño, aprendió a volar entre las mariposas, y subió alto, tan alto que apredió a beber de la luna.