Monologo: Pensar (oxhambroix)
Sentado ante el computador y observaba a mi alrededor mi habitación, pero no encuentro lo que me faltaba, pero tampoco sé qué es, y dejo de prestarle atención pero simplemente no puedo, ni quiero dejar de hacerlo porque se siente como algo inalcanzable, en mi desespero solo queda escuchar música y visitar los recuerdos de mi mente para encontrar la razón y recordando la encontré a ella, pero para entonces solo veía su cuerpo, ya simplemente no era su alma sino que solo veía un objeto inerte y sin sentido alguno pero trate de pedirle su ayuda, estaba tan mal que ella me traía más melancolía de que la que ya tenía y es que no la podía olvidar y tampoco quería porque sentía que faltaría a mis principios y tan descarado soy que hablo de principios como si hacerle todo el daño del mundo a ella no fuera ya de por sí bastante descortés pero ella tampoco me supo ayudar o más bien simplemente era una imagen reflejada de cómo me sentía pensando en ella, de cómo había sido tan sádico con su corazón, de cómo le arranque esa belleza con mi frialdad e indiferencia, la verdad pensé que estar pensando era lo peor que podía hacer porque solo me causaba melancolía pensar en mi pasado, de como pude corromper un corazón hasta el punto de fracturarlo, pensando en cómo aliviar mis errores pero simplemente… no pude, algo dentro de mí no quiere pero otra parte lo desea, simplemente mi condena es no amar, amar a otras personas lastima y estoy seguro que si lees esto entiendes a qué me refiero, no simplemente por el desengaño o el remordimiento que cargas en una relación muerta, sino el hecho de que se llevan un pedazo de ti, prefería matarme, así que volviendo a lo que me conllevo a pensar en mi pasado, recordé que lo que buscaba era morir, pero lastimosamente no fue así, seguía sufriendo y cargando con esta pesadilla todos los días, mire mi reloj y eran las 6:30 pero sentía frió no sentía ganas de vivir ni tampoco quería buscar las razones así que la tentación domino mi cuerpo, quería saber de ella ¡aunque fuera lo último que hiciera!, recordé que mi padre tenía un arma guardada en el cajón así que la encontré, la cargue y…
No, no me suicidé. De hecho, estaba entre mis pensamientos más profundos. Es más, iba a efectuar un asesinato contra mi ser, contra esa persona que no podía vivir sin sufrimiento, y sin poder amar.
Lo haría hasta que la encontrará a ella y poder decirle lo que no pude antes o hasta que supiera que ella estaba muerta, para poder acompañarla... pero la tentación de morir siempre seguirá ahí porque, aunque la encontrara quisiera condenarme por todo ese daño cometido a su persona.
