Las primeras gotas de lluvia
Me quitan algo de silencio,
Esta vez ya no me queda nada
Los sueños que nunca,
al final de cuentas sueños…
Flotan a la distancia sobre tejados aun soleados.
Caminar hoy por las calles
de viejas infancias,
No me da la esperanza de lo perdido,
No me da la tristeza que acostumbraba
a serme otra vez un niño;
Ni los pecados sometiendo a la flor,
a noches de luna para desnudar
sólo el corazón.
Muertos igual que yo
Unos recuerdos que ya que,
Brilla la ciudad en lo que yo
creo que es una ilusión
al anochecer.
*
Las nubes pasan como minutos
desvaneciéndose al cruzar otros cielos
para ser olvidadas,
Luego seguiré yo,
Luego mi amor me pedirá el beso
del que antes se burló,
Y yo le diré
que el tiempo nunca muere pero que la vida sí,
es demasiado tarde.
La ciudad te verá de rojo sonreír
amando conquistar,
Dejo que el aire se me escape
porque al fin de cuentas no lo tendré.
*
El aguacero que no cayó
sobre un montón de vidas
se guardará para otro momento
para cuando yo, aprenda con una sonrisa
lo que siempre llevo dentro:
la pena y la felicidad.
La hora seis llena de frío
de las primeras luces prendidas
envejece las caras de los niños
mientras juegan un rato más
antes conmigo,
Pero yo me quedé en un momento de la historia,
No me di cuenta cuando hacia atrás
se tiraban las horas.
Muertos igual que yo
Unos recuerdos que ya que,
Brilla la ciudad en lo que yo
creo que es una ilusión
al anochecer.
*
Las nubes pasan como minutos
desvaneciéndose al cruzar otros cielos
para ser olvidadas,
Luego seguiré yo,
Luego mi amor me pedirá el beso
del que antes se burló,
Y yo le diré
que el tiempo nunca muere pero que la vida sí,
es demasiado tarde.
La ciudad te verá de rojo sonreír
amando conquistar,
Dejo que el aire se me escape
porque al fin de cuentas no lo tendré.
*