Para uno que fue grande,
que fue grande para un pueblo,
que fue grande para una nación.
Que hizo vibrar mi corazón de júbilo y alegría,
que amo con toda mi alma,
que hacía que vistiera y luciera
con orgullo el azul de su bandera,
Oh!, Glorioso Ballet Azul.
¿Por qué? ¿Por qué me has defraudado?
Por qué has acabado con las ilusiones de tus hinchas,
de aquellos que te acompañan cada domingo,
ya sea en el estadio o en casa.
¿Por qué rompes las ilusiones
de conseguir una nueva estrella
que ilumine nuestro firmamento?
Por favor no nos hagas sufrir más,
levanta la moral de tus pobres y
dolientes hinchas que no hacen sino
sufrir tus derrotas y derramar lágrimas
por la humillación de ser los últimos
en vez de ser los primeros
como fue costumbre por mucho tiempo.
Así clamamos dignidad tus hinchas,
que a pesar de la pena y el dolor,
seremos fieles a ti, Millonarios.
2001