He cometido el más castigado de los pecados
he besado a otro
a pesar de lo mucho que te he amado.
No sé lo que me ocurrió
quizás el no sentir tu calor
o una leve lejanía
que en nuestras vidas
poco a poco apareció
y el no sentir tus caricias
ni el fuego que nos unió.
Pecado de amor
porque eres lo más bello
que la vida me brindó
porque te amo tanto
que me duele el corazón
no sé como pude darle a otra boca
mis besos, mi sabor,
si tú eres el dueño
de mis labios, de mi cuerpo,
de mis pensamientos, de mi olor.
Te he engañado malvadamente
y no me puedo explicar
que tenia ese que me logró convencer
y lo besé con locura,
por un rato te olvidé,
pero al despertar de esa lujuria
lloré, lloré, y lloré,
porque tú eres
el hombre que siempre adoraré.
Dime, ¿qué vamos a hacer?
sé que te duele esta traición tan cruel,
pero te amo, lo sabes muy bien,
¡no me dejes, apiádate de mí!
Vete, pero piénsalo bien,
he pecado, no te respeté,
un verdadero amor se puede enfriar,
pero nunca se apaga,
hoy te vas,
pero me buscaras mañana.
Autora. Carmen L. Rosa.