Identificarse Registrar

Identificarse

Índice del artículo

7

Primavera del 2016.

El factor Rh (Rhesus) en la sangre humana se convirtió en el enemigo mortal de su poseedor. Las primeras víctimas se registraron en el segundo semestre del 2012. Una palidez intensa y morir a las pocas horas o días, era como si se tratara de una acelerada leucemia voraz, algunas personas parecían más resistentes que otras, pero al final quien manifestaba los síntomas moría tarde o temprano. La aparición de más victimas fue exponencial en todo el mundo, no había patrón geográfico ni de clase alguna, murió más del 70% de la población humana del planeta en menos de dos años. Otro 15% aproximadamente, a los que misteriosamente el antígeno en su sangre no se activó resistieron, pero no más de cuatro años. Así se estima que un 85% de la población total desapareció.

Siempre lo mismo: empalidecían y en pocas horas morían. Sin quejidos ni gritos, porque no había dolor físico en parte alguna del cuerpo. Angustia, miedo, sufrimiento y desconsuelo por la pérdida de tantos seres queridos era lo común, hasta los niños olvidaron reír. Familias enteras fallecieron. Quienes sobrevivían habían perdido a casi todos sus familiares, algunos no resistieron y recurrieron al suicidio. Bebes quedaban sin padre, madre y hermanos. La gente al caminar o al conducir sus autos debía tener cuidado de no pisar los cadáveres tendidos en la calle? En la Historia ni siquiera las pestes de la Edad Media podían compararse con esta hecatombe.

Algo nuevo en el ambiente tal vez debido a tanta radiación, contaminación, destrucción del ozono, demasiado monóxido de carbono, gases emanados de los volcanes, o a lo mejor la suma de todo lo anterior, activaron estos antígenos como una bomba de tiempo para el cuerpo, pues en cuestión de horas la sangre se disolvía, los linfocitos se multiplicaban con extraordinaria rapidez y anormal crecimiento engullendo a sus primos los glóbulos rojos y demás células del flujo sanguíneo. La palidez era la anunciación de una pronta muerte sin dolor, el único consuelo.

Una enfermedad hemolítica sin causa o detonante aparente. Increíble inclusive para los científicos y biólogos, era como si por miles de años los humanos cargamos con un ?software? secreto de autodestrucción, hasta que llegó el ?usuario? con la clave correcta de activación? ¿O acaso, fue la mano de Dios?

Todo sucedió tan rápido que la Ciencia no alcanzó a desarrollar el antídoto o el remedio a tiempo.

En estos días quedan poquísimos humanos vivos con factor Rh positivo, aislados en laboratorios, algunos voluntariamente y otros no tanto. Ni el sol les permiten ver y el aire que respiran es ultra purificado mezclado con oxigeno, pero siguen muriendo.

Inmunes pues los humanos con factor Rh negativo, independiente del tipo de sangre, complexión física, estado de salud, edad, sexo o raza, parecen ser los destinados a continuar la especie.

Einstein, si viviera, tal vez diría que Dios ha jugado a los dados y éstos fueron los ganadores: Mil millones de humanos, quienes ahora poblaban el planeta Tierra.

 

8

Ultimo día del año 2012.

Muy pocos tienen ánimo para festejar.

El mundo jamás olvidará este fatídico año. Además de las temperaturas extremas registradas en casi todo el planeta, de las sequías e inundaciones; de los monstruosos huracanes y ciclones en el Atlántico, en el Pacífico y en el Indico; del inexplicable gélido invierno y sofocante verano; por no mencionar los fuertes terremotos y las anormales erupciones volcánicas, y del rápido descongelamiento polar que inundó las costas; el Hombre, la especie dizque responsable de La Tierra, en nombre de sus ideas y creencias utilizó su tecnología en contra suya, en contra de todas las especies incluida la propia.

Primero fue el cruce de misiles nucleares en el Medio Oriente, dejando prácticamente inhabitable por años aquellas sagradas tierras. Luego la bomba nuclear que se tuvo que detonar en el desierto del oeste norteamericano. Y hace menos de tres meses, como si la destructividad fuese contagiosa, una guerra fronteriza entre India y Paquistán en la que no vacilaron en utilizar sus armamentos nucleares? Arruinando el subcontinente de la espiritualidad y de la paz, la tierra de Buda y Gandhi. Parece que no sirvieron sus enseñanzas, como no sirvieron las de Jesús y de Mahoma en la Tierra Santa. ?Nadie es profeta en su casa?, bien lo advirtió el Maestro de Galilea hace casi dos mil años.

 

9

Durham, Carolina del Norte, primavera del 2018.

-Gracias Señor del Universo porque me hiciste generoso para compartir lo que se y lo que me enseñaste, lo que tengo y me diste, aunque no lo merezca. Gracias Padre Santo porque me diste sabiduría para iluminar el camino a otros, aunque no tenga la luz suficiente para mí. Gracias Dios Todopoderoso por la iglesia que me diste, aunque la he construido con egoísmo y vanidad. Gracias Creador nuestro por el don de consejo para guiar a quienes me escuchan, aunque muchos de mis consejos no los sigo. Gracias Maestro Divino por mostrarme los errores y equivocaciones que cometo, sin los cuales no aprendería ni evolucionaría. Gracias Dios Maternal por enseñarme la otra Creación y la otra Vida a través del sueño y la Percepción, aunque no entienda bien. Y Gracias Abba por lo que aún no sé ni soy consciente ?concluyó Ethan su oración, mientras su hermano lo acompañaba también de rodillas frente al crucifijo de la pequeña sala.

Grupos

Abierto
7 Usuarios
Abierto
4 Usuarios

Están en línea

Hay 160 invitados y ningún miembro en línea

Concursos

Sin eventos

Eventos

Sin eventos
Volver