Cansado y aburrido de la eternidad, viró a la izquierda, y comenzó a descender por la angosta callecita de piedras, hacia la esquina de los mendigos...al detenerse frente a ellos ...uno de ellos, el de anteojeras, le dijo... aquí esta tu reloj!!.. el que buscas para entrar en el tiempo!!...y se lo coloco en las manos. Después de varias horas de esfuerzos inútiles por poner a andar el reloj, el Eterno lo dejo caer ..y se escucho el tic! tac!! Monótono e infinito del comienzo del tiempo...la esquina quedó desierta cuando el eterno comenzó a envejecer aceleradamente!!