Tuve uno de esos sentimientos, creo, de cuando uno va a morir, no estoy muy seguro si tomarlo como un sentimiento o como una broma muy fea y grosera. Tuve la agresividad de levantarme de la cama y sentirme hipócritamente feliz y decir que sí a un no.
No se preocupen necias bestias, conseguiré un corazón más enrojecido y triste que el mío, te quería decir nuevamente que eras una inútil, por no terminar conmigo, pero no me di cuenta mi ojo derecho no me dejó verte.
Cuando el migajón de las ideas pervertidas me había dejado de picar la panza, pensé que te quería más, pero apagué el cigarro en pseudo sentimiento de morir. Tengo más miedo de no saber si debajo de una piedra te encontraré.