ESTRELLA BLANCA
Monólogo para una actor, de menos de 5 minutos de duración
por W. Benjamin
Microteatro
EL FORMATO
Ésta una obra de microteatro. No requiere escenografía y
sólo es necesario el atrezzo que complementa la
caracterización del protagonista. Su duración es
inferior a 5 minutos. Está concebida para ser
representada profesionalmente en espacios de microteatro,
o, de manera aficionada, en escuelas o talleres de interpretación.
PERSONAJE
JACK Ronda los cuarenta. Es un hombre desacomplejado. Locuaz. Trabaja, desde hace tiempo, como escritor en una editorial. En su tiempo libre le gusta leer y estar con los amigos.
VESTUARIO
Jack lleva puesto todo el tiempo el traje que uso la primera vez que lanzo su libro, un traje gris elegante aunque desgastado por los años, con su maletín y la máquina de escribir.
LUGAR
La acción se sitúa en la azotea de un alto edificio de oficinas.
TIEMPO
Tiempo presente.
SITUACIÓN
En la cornisa de edificio, amenazando con
Lanzarse a las estrellas.
Sabes estrella blanca, tú a quien todos acuden cuando sus corazones se embarullan de dudas y melancolía, tu que conoces mis noches a ciegas y mi sueño a prisa, que al hombro del día te has quedado dormida observando mis penas y alegrías, tu podrías darme una respuesta a la incertidumbre que devora mi alma tiste.
¡¿Qué diablos no está bien?! No está bien el colegio y su sistema educativo, no está bien la conformación de la familia dentro de la comunidad, tampoco lo está la sociedad y la política, no está bien nuestro país y nuestros reinos y menos aún el continente entero. Todo es irregular, la tierra resulta no ser una esfera perfecta, nada está bien, y aun así, como todo el amor que siento, no es perfecto pero con que sea real, para mí es suficiente, con que pueda estudiar y tener mi familia bien, es suficiente, con que no estemos en guerra y muriendo gente a millares, es suficiente, con que yo te pueda expresar todo, y ella, con sus ojos suaves me vea y su sonrisa deslumbrante acribille mi mente, joder, eso es perfecto. Y si, nada está bien, ¿y qué?
Esta noche por fin me he dado cuenta de la miseria que soy, y porque no le merezco.
Me di cuenta que ella merece a alguien que no sea como lo soy yo, alguien que no sea adicto al café y el tabaco, alguien que no se ahogue permanentemente en el alcohol, alguien atento a las notas y con mejor comportamiento, alguien que no tenga marcado el cuerpo en tinta y mutilado su piel, alguien responsable, tolerante, de pocos celos, merece alguien que no esté en constante guerra consigo mismo, alguien sin un afán por su último aliento de vida, alguien que no se la pase soñando con los ojos abiertos. Merece todo lo contrario a lo que soy yo, es por esto que soy miserable, así bien, comprenderé si prefiere a alguien más, no obstante, juro que por ella, me convertiría en lo mejor hombre, no para satisfacerle la gana a otros, lo hago porque ella merece lo mejor, y por ella, con esperanza sería lo mejor de mí, porque quiero verle muy feliz, quiero que esté siempre cerca esos ojos dilatados, color avellanos, su aroma floreado flotando cerca de mí, su vos caminando en mi cabeza como en cada mañana, sus delicadas manos que recorren mi sombrío rostro me hacen creer que he nacido nuevamente. Comprenderé si no merezco una oportunidad a su lado, pues ahora frente a este espejo lleno de estrellas, me doy cuenta que nunca le e merecido, pues le amo.
Me siento jodido mi querida luna, dime ¿qué harías tú, en mi lugar?
Habrás visto todas las veces en que mi pluma se alzó sobre el papel mientras describía un mapa que pocos entenderían, tu que viste como el café se hacía poco al pasar las luciérnagas alumbrando mi imaginación, tu que me viste tan enamorado de otra vida en tinta escarlata revuelta con mis esperanzas, ahora no sé quién soy ni que hacer en esta brevedad de la vida.
Acógeme entre tu manto luna mía, y aunque tú también seas la luna de mi amada, hazme soñar en un amanecer junto a ella.