Para la naturaleza, las diferencias palpables e intangibles entre Hombre y Mujer
son solamente la expresión de una creación perfecta, mientras tanto al Ser
Humano tan solo parecen servirle para crear división de lo indivisible y separación
de lo inseparable. Las diferencias entre el Hombre y la Mujer son el gran baluarte
sobre el cual el Creador manifiesta su infinita generosidad, las diferencias entre el
Hombre y la Mujer son el gran baluarte sobre el cual el Creador concreta su
realización… la inagotable P R E S E N C I A D E D I O S;… pero para el Ser
Humano, las diferencias entre el Hombre y la Mujer tan solo significan una
detestable rivalidad sobre la cual se inventan permanentemente privilegios y
poderes de un género sobre el otro, privilegios y poderes que desconocen el
misterio de la Unidad, que niegan el placer más puro. Hoy en día la gran mayoría
de las sociedades del mundo realizan enormes esfuerzos para establecer
progresivamente un equilibrio social que garantice igualdad de derechos tanto
para mujeres como para varones, sin privilegios que beneficien a alguno de los
dos por la condición de ser mujer o varón.
Esta maravillosa intención, todos la celebramos, la apoyamos y la impulsamos;
pero falta mucho porque esto es simplemente cortar ramas y de raíz no
demasiado, esta loable labor aun no es suficiente para que entendamos que
las diferencias palpables e intangibles entre los dos únicos géneros de la especie,
solo fueron creadas para unirnos el uno con el otro; las diferencias físicas y
espirituales entre el varón y la mujer jamás fueron concebidas con el ánimo de
separarnos, todo lo contrario; tan solo ahí, en esa dualidad varón mujer se
perfecciona la creación porque uno solo está incompleto pues le falta el otro, su
complemento ideal, y viceversa.