Hoy Cerré - Poema
Cerré mis oídos, que tan aturdidos se sentían, padeciéndose de ruidos crueles, sucesos producto de las lenguas más filosas y susceptibles a la caza.
Cerré mi boca, por temor a despertar las bestias, las coronas y las cabezas rodantes, atraer el infortunio de los quienes en la biblia.
Cerré mis ojos, para no ver más la fe pérdida que se desvanece a causa de lágrimas y llantos, afligidos penando al igual que quienes leen historias de fantasía en medio de los tiempos de guerra.
Cerré puertas, protegidas por un león de 3 cabezas y una mujer de 7 lenguas, que contienen los secretos de un alma pecadora, la cerré para que los quienes no puedan más destruir.
Cerré ventanas, rasgue las cortinas, para que así los cuervos pudieran ver a través de esta como lo hacen cuando los ojos de los caídos pierden su brillo, ser testigos de los recuerdos que se pierden en él hito del olvido.
Cerré mi corazón, no por miedo o por temor a que le puedan hacer daño, lo hice para que él alma atrapada tuviera una esperanza perpetua, que alguna vez la pluma del cuervo atravesará la cerradura del rey.
Es por esto que las rosas abren sus pétalos ante él ímpetu del sol, y se cierran al estremecer de la Luna.
Pero lo que intriga mi conciencia es que la Luna puede ofrecer luz a las sombras que produce la acción del Sol.
Comprendí entonces que no solo el amor logra abrir un corazón, se necesita de ambas alas para volar, se necesita cerrar, para dar vida a la llave.
Hoy Cerré.
-Willmer Camilo Castillo Páez
(1-Diciembre-2016)
En Colombia a partir de la Ley 23 de 1982, Con la expedición de la Decisión Andina 351 de 1993, Registro Nacional de Derecho de Autor. (artículo 6 Ley 44 de 1993).
Todos los derechos reservados.
Se prohíbe la reproducción total o parcial de esta obra sin permiso escrito de el autor.
De Colombia para el mundo.
