Un cuerpo aterido después de arder no encuentra su estado natural
olvida su pureza contaminándose conscientemente
adentro dudas estallan unas contra otras
festival absurdo contradictorio
de la autocompasión recorre el camino
Todos son culpables menos tú
¡insensibles!
¿Cómo viven si estás condenado?
Si... coserles su estúpida sonrisa quieres
la envidia es el ácido que corroe tus entrañas
sus imágines turbias complementan el ataque
envenenada está la posibilidad de superarlo
Asesino, te habitas aniquilándote
del alivio rehúyes
a tu estado dependiente rindes pleitesía
convencido retrocedes
se absorbe la inmensidad del calabozo poroso
devora el pasado de un sólo bocado
el afán sepulta la bondad que consume impaciente
entre sobresaltos duerme la mitad del ser
la otra espera reincorporarse y demostrar su grandeza