Riega en las sombras...
como riegas las hojas de tu jardín,
has en mi un ruiseñor digno de quererte
sin retazos de memoria desperdiciada.
Como querías que te amara aquel
que se fue en tu seno de niña…
¿Acaso? El no mismo se perdió entre tanta belleza.
Ahora dejad que se riegue tu pasión,
en el altar de la censura mojada.
Volaré para poder llegar a ti,
beberé embriagándome;
del sabor néctar pétalo que tienes.
Comeré del fruto de las hojas de tu tallo adormecedor
que es cuerpo.
Me meteré en tu raíz de lo mas profundo
tocando donde terminas,
te amaré de la forma que en sueños solo ama el loco soñador .
¿Quemará la hoguera tanta locura?
Sin que sepa amargo...
Serás tú quien vuelva loca mi mente y mi ser.
Amante de media noche vuelve tan solo un instante
para iniciar de nuevo este idilio.